BIENAVENTURADOS LOS LIMPIOS DE CORAZON PORQUE VERÁN A DIOS.

Por Stanley Gómez.
"Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios." Mateo 5:8

Sin lugar a dudas, este ha sido uno de los pasajes bíblicos que más han marcado mi vida. Debo admitir que por muchos años no lograba comprender la grandeza de estas palabras, aunque lo había leído muchas veces; sin embargo, se necesita sencillez para comprender lo grande de estas palabras.

Muchas veces, en nuestro afán por conocer a Dios damos más valor a los estudios teológicos, escatológicos y hermenéuticos, (no digo que no debamos dar importancia a ellos); pero lo que pienso, es que nos llenamos más de teoría, y olvidamos que Dios se manifiesta en nuestra vida de formas tan palpables y diversas, que a veces ni cuenta nos damos que Dios nos bendice en cada detalle a nuestro alrededor.


Recuerdo una ocasión, que por nuestro negocio de cereales, mi esposa y yo estábamos hartos por la plaga de ratones; estos animalitos tan pequeños nos tenían hasta la saciedad; no sólo eran molestos por las noches, sino que terminaban con nuestra mercadería, y lo peor, ¡no encontrábamos quién nos regalara o nos vendiera un bendito gato!

Un día hice una pausa y le dije a mi esposa con aire de serenidad: Daysi, nosotros no encontramos un gato porque no se lo pedimos al Señor, pidamos al Señor y seguro encontramos uno". Ese mismo momento nos tomamos de la mano y nos arrodillamos en nuestra habitación, e hicimos esta oración sencilla:

"Señor por favor mándanos un gato porque ya no aguantamos esta plaga de ratones, por favor en nombre del Señor Jesucristo te lo pedimos, amén."

No lo van a creer, pero no habían pasado 5 minutos cuando a nuestro negocio llegó un Señor a quién no conocíamos, y nos dijo que le habían pedido que se deshiciera de un "gato amarillo"; mi esposa y yo nos miramos el uno al otro, y supimos que Dios nos estaba respondiendo. Seguramente el gato era despreciable para alguna familia, para nosotros una bendición. Toda una autoridad en casa cuando de ratones se trata, así que nos quedamos con él.


Desde entonces, aprendimos que muchas veces no recibimos lo que necesitamos porque no lo pedimos al Señor. Ese día pude darme cuenta que Dios cuida de nosotros, aún en los menores detalles. Vimos la mano de Dios... ¡Vimos a Dios!...

El punto que quiero resaltar amigo lector, es que Dios es tan lindo, que se manifiesta en cada detalle de nuestra vida. Él siempre está al lado de los que le piden con corazón sencillo y limpio.

Podría escribir un libro contandoles pequeñas historias de experiencias sobrenaturales que han acompañado mi vida de cristiano, y que dan testimonio de lo real, amoroso y cuidadoso de nuestro Dios para con sus hijos.

Con todos el Señor se manifiesta -¿Qué se necesita para verlo?: Tener un corazón limpio.

¿Qué necesitas para tener un corazón limpio?... Ser como un niño.

¿Cómo es un niño?

Un niño no miente, un niño es sencillo, no odia, no guarda rencor, no está lleno de soberbia, ni arrogancia, ni vanidad, ni codicia, no es iracundo, un niño cree todo lo que sus padres le enseñan, un niño no tiene dificultades para creerle a Dios.

Jesús dijo: "Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos." Mateo 19:14 (NVI)

Recuerda, El Señor se manifiesta de muchas maneras: En el cantar de las aves al amanecer cerca de tu casa, en cada flor del campo y tu jardín, en el perro que ladra cuando un desconocido ronda la casa con malas intenciones, etc.

Vivamos con gratitud sabiendo que tenemos un Dios que nos ama, e hizo todas las cosas bellas para que las disfrutemos y apreciemos el regalo de la vida.

¡Dios te ama!

Tema relacionado: Guarda tu corazón.

2 comentarios:

silvia patricia perez dijo...

hola marquitos aunq es 1ra vez que entro a tu pag me gusto mucho en especial el video de esta semana son muy impactantes las imagenes.. disculpame por todo lo malo q he hecho y dicho ultimamente deveras lo siento y te pido perdon de todas las maneras posibles... t k m ... nos vemos pronto... :-)

A dijo...

Gran Historia Mi Amigo Amado ...!